Junio 02, 2025

Diagnostican al expresidente de EE.UU. Joe Biden con una “forma agresiva" de cáncer de próstata

El expresidente de EE.UU. Joe Biden fue diagnosticado con una “forma agresiva” de cáncer de próstata, según un comunicado de su oficina el domingo, y el cáncer se ha extendido a los huesos.

“La semana pasada, el presidente Joe Biden fue examinado por un nuevo hallazgo de un nódulo prostático tras experimentar un aumento de síntomas urinarios. El viernes, se le diagnosticó cáncer de próstata, caracterizado por una puntuación de Gleason de 9 (Grupo de Grado 5) con metástasis ósea”, indica el comunicado.

“Si bien esto representa una forma más agresiva de la enfermedad, el cáncer parece ser sensible a las hormonas, lo que permite un manejo eficaz”, agregó.

Biden, de 82 años y su familia “están evaluando las opciones de tratamiento con sus médicos”, indica el comunicado.

La noticia llega días después de que un portavoz de Biden dijera que el expresidente fue evaluado recientemente por un “pequeño nódulo” descubierto en su próstata.

“El cáncer de próstata es muy común”, afirmó el Dr. Jamin Brahmbhatt, urólogo y cirujano robótico de Orlando Health y profesor adjunto de la Facultad de Medicina de la Universidad de Florida Central, quien no participa en el tratamiento de Biden. “A medida que envejecemos, la mayoría de los hombres tendrán algunas células cancerosas”.

A los cánceres de próstata se les puede asignar un grado, conocido como puntuación de Gleason, según el aspecto de las células al microscopio. Una puntuación de Gleason de 9 “significa que es la forma más agresiva de cáncer de próstata”, explicó en un correo electrónico el Dr. Benjamin Davies, profesor de oncología urológica del Centro Médico de la Universidad de Pittsburgh, quien tampoco participa en el caso de Biden.

Biden se encuentra en su casa en Wilmington, Delaware, este fin de semana, según una fuente cercana. CNN ha preguntado dónde recibirá tratamiento el expresidente.

El cáncer es “grave”, pero hay “buenas noticias”, dicen los expertos

Además del índice de Gleason, factores como los niveles de antígeno prostático específico en sangre, las pruebas de imagen y los hallazgos de la biopsia son importantes para determinar el posible comportamiento del cáncer y las mejores opciones de tratamiento.

Incluso los pacientes con cáncer de próstata de alto riesgo “pueden llevar una vida bastante normal y tener una buena calidad de vida, siempre que reciban tratamiento”, afirmó Brahmbhatt. Este tratamiento es personalizado para cada paciente y puede presentarse en diversas modalidades, como terapia hormonal, quimioterapia o radioterapia.

El hecho de que el cáncer de Biden se haya extendido a los huesos “es muy grave e incurable”, afirmó Davies. Sin embargo, “hay buenas noticias en las nuevas terapias hormonales y de quimioterapia que se han implementado en este campo en los últimos años, las cuales han mostrado resultados impresionantes y han prolongado significativamente la longevidad de los pacientes”.

Podrían pasar algunas semanas para ver la evolución del tratamiento de Biden, afirmó Brahmbhatt. “Algunos tratamientos pueden afectar la memoria, el estado de ánimo y la calidad de vida, así que hay que tener mucho cuidado con lo que se hace, porque no hay que ser demasiado agresivo”.

El cáncer ya había afectado a la familia Biden

El cáncer ha sido durante mucho tiempo un problema personal para Biden, cuyo hijo Beau, un veterano de la guerra de Iraq, murió de cáncer cerebral en 2015 a los 46 años.

Biden creó la iniciativa “Cancer Moonshot” tras el fallecimiento de Beau. El programa, fundado durante la vicepresidencia de Biden, se restableció en 2022 con el objetivo de “erradicar el cáncer tal como lo conocemos”.

“Movilizaremos a todo el país para reducir a la mitad las muertes por cáncer en Estados Unidos en 20 o 25 años y aumentar el apoyo a los pacientes y sus familias. Confío en nuestra capacidad para lograrlo. Sé que podemos, pero no se trata solo de algo personal, sino de lo que es posible”, dijo Biden en agosto pasado.