El presidente LUIS ARCE reafirmó su compromiso con la soberanía nacional tras ser proclamado candidato presidencial del MAS-IPSP en un masivo acto realizado en la plaza Villarroel, en LA PAZ. En su intervención, aseguró que consolidará la industrialización del país y descartó acudir al Fondo Monetario Internacional (FMI) o buscar el respaldo de los Estados Unidos.
“Nosotros no vamos a ir a arrodillarnos al Fondo Monetario Internacional, no vamos a estar buscando apadrinamientos de los Estados Unidos. Nosotros nos basamos en nuestra soberanía”, afirmó, diferenciándose de candidatos de la oposición que plantean acceder a créditos externos.
Con esta proclamación en LA PAZ, ya suman seis actos similares a nivel departamental, luego de los realizados en BENI, PANDO, POTOSÍ, CHUQUISACA y SANTA CRUZ. Para el mandatario, esto marca el inicio de la carrera electoral con el respaldo del Pacto de Unidad.
Arce advirtió que el proceso electoral no será fácil, como ocurrió en 2020, cuando obtuvo el 55,11% en primera vuelta, y denunció que la “estructura de la derecha” se activará nuevamente con apoyo externo. Sin embargo, confía en que el respaldo del pueblo boliviano prevalecerá una vez más.
El jefe de Estado remarcó que no está haciendo promesas, sino ejecutando acciones concretas como la exploración de nuevos yacimientos para garantizar el suministro de combustibles. Destacó el descubrimiento del campo Mayaya Centro por YPFB en el departamento de LA PAZ, el cual permitirá generar regalías, IDH y reactivar el crecimiento económico.
Arce alertó que sus adversarios apuestan por una “capitalización disfrazada” y la entrega de los recursos naturales al capital extranjero. No obstante, aseguró que el pueblo, organizado a través del MAS-IPSP, los derrotará en las urnas.
Reivindicó además la vigencia del Modelo Económico Social Comunitario Productivo y denunció que tanto el “evismo” como la oposición buscan asfixiarlo financieramente frenando los créditos en la Asamblea Legislativa. Según el mandatario, las organizaciones sociales son las únicas que presentan un proyecto de país que apuesta por una Bolivia industrializada, con más de 170 plantas en marcha.
“Nadie va a quitar ahora de la cabeza el pensamiento de que tenemos que industrializar nuestro país”, concluyó.
RPN/RPN